Clemente Villaverde

«Paso de buey, ojo de halcón, diente de lobo y hacerse el bobo,
lo que significa humildad, trabajo e ilusión
«

Clemente Villaverde, Gerente del Atlético de Madrid

Nació en Asturias, en Cangas de Onís, pero a los catorce años su familia se muda a Madrid, una ciudad que además de brindarle la primera oportunidad dentro del mundo del fútbol profesional, terminó por convertirse en segunda casa. Como dirección postal de referencia, Paseo de la Virgen del Puerto número 67, Estadio Vicente Calderón, el templo del Atleti es la gran debilidad de Clemente Villaverde, de ahí que lleve toda una vida trabajando para el equipo, primero en el campo y posteriormente en la directiva.  Charlamos de fútbol y estilo con el Consejero y Gerente del Club.

TB: ¿Quién es Clemente Villaverde?

Clemente: Alguien normal y corriente que lleva vinculado al mundo del fútbol muchísimos años.

TB: Nacido en Cangas de Onís y madrileño de adopción…

Clemente: Soy asturiano y ejerzo de ello, eso no quita que siempre haya procurado devolver al Atlético de Madrid lo que el Atlético me dio a mí. Gran parte de mi formación, sobre todo como persona, y muchísimos de mis valores se los debo al Club.

TB: ¿Cómo fue el salto de Asturias a la capital?

Clemente: Llegué a Madrid con mi familia a los catorce años y tuve la fortuna de ser de los elegidos. Cuando firmé por los Juveniles comencé a hacer lo que me apasionaba, convirtiéndolo en manera de vivir. Estuve en el equipo hasta los veintiocho años. Después me fui al Málaga aunque posteriormente volví a Madrid y compaginé el fútbol con mi profesión de abogado.

TB: Dos ocupaciones tan distintas, harías malabares con las horas del día…

Clemente: No me pareció un esfuerzo extraordinario. Mucha gente combina diferentes actividades. Yo me propuse esos dos objetivos e hice todo lo posible por llevarlos a cabo. Ahora soy Director General de Fútbol Profesional. También soy Vicepresidente de la Liga de Fútbol Profesional.

TB: Responsabilidades que te harán viajar a menudo…

Clemente: Estoy fuera varios días a la semana. Viajo muy a menudo con el equipo. Me gusta mucho hacerlo pero para quienes me rodean es un sacrificio pero lo aceptan. No obstante los ratos que paso con los míos intento que sean de mucha calidad.

TB: ¿Qué crees que has aportado al Club?

Clemente: No soy los demás, habría que preguntárselo a ellos. Lo que sí que tengo es la tranquilidad de saber que estoy poniendo todos los medios para cumplir con mis funciones y la satisfacción de prestar mi trabajo al Atlético de Madrid.

TB: ¿Qué papel jugó tu padre en tu carrera?

Clemente: En mi casa siempre nos dejaron plena libertad para elegir. Jamás se metieron en mis decisiones, al contrario, me apoyaban en todo. Al final, a los hijos lo que tienes que hacer es darles una buena educación e intentar orientarlos, pero siempre sabiendo que las decisiones son suyas. Los que se tienen que equivocar y acertar son ellos.

TB: Jugabas de defensa, una posición quizás menos protagonista que la del delantero…

Clemente: En juveniles fui delantero pero acabé reconvertido en defensa… y estuve encantado siendo defensa y teniendo un delantero muy crack. Cuando entiendes la idea de grupo y de trabajo en conjunto el triunfo está basado en la suma de todos. En el Atlético hay un equipo increíble asumiendo responsabilidades personales. Cada uno individualmente favorece al resto.

TB: Cierta vez declaraste que, además de saber perder, también hay que saber ganar.

Clemente: Ganar implica tener una buena dosis de factores que te hagan ser más ganador.

TB ¿Ha cambiado el fútbol?

Clemente: Por supuesto. Ha cambiado a mejor, empezando por las formas de entrenamiento. Hoy en día se juega con otro tipo de visión. Creo que el profesional sigue siendo el mismo -continúa habiendo buenos, malos y regulares- pero hemos evolucionado hacia la rapidez. Cualquier juego, cuanto más rápido, mayor técnica requiere y mayor dificultad de control, y justo eso es lo que lo convierte en mejor.

TB: ¿La afición del Atlético es sufridora?

Clemente: Para nada. No entiendo ese San Benito porque no se acompaña con la realidad. Históricamente somos el tercer club de España en todo, así que si somos sufridores, lo que hay por debajo de nosotros no sé qué será. Lo que tenemos es una manera de entender y corresponder al sentimiento diferente a la de muchos. Para mí el Atlético de Madrid reúne una serie de condiciones muy importantes, no sólo a nivel deportivo sino en cuanto a manera de ver la vida.

TB: ¿Tienes algún momento especialmente importante a destacar en tu trayectoria?

Clemente: Todos. La vida ha sido muy generosa conmigo en mil aspectos.

TB: ¿Qué es el éxito?

Clemente: No es fácil de definir. Lo que para ti puede ser un exitazo para otra persona no lo es y viceversa. Yo hablaría más de actitud ante las cosas.

TB: Qué opinas de Luis Aragonés.

Clemente: Opino que basta observar su trayectoria para ver los grandes pasos que dio en el fútbol español. Gracias a él se cambió un chip, se cambió una época. Era un hombre que cualquier adjetivo que ponga ahora mismo no llegará nunca a la dimensión del gran trabajo que desarrolló.

TB: ¿Sentimiento o razón?

Clemente: El fútbol tiene un elemento sentimental muy grande y otro de trabajo inmenso. Muchas veces no pueden estar unidos. Yo intento desconectarlos porque solapados, a veces no te dejan abrir bien la mente para tomar decisiones.

TB: ¿La jugada más difícil de tu vida?

Clemente: La vida hay que vivirla y saber aceptar todos los momentos.

TB: ¿Te fías de las primeras impresiones?

Clemente: A nivel estético, sí. Me dicen bastante de la personalidad, sin embargo también te puedes equivocar. Me gusta la ropa y vestir de una determinada forma, sin embargo esto no quiere decir que me parezcan mal otros estilos.

TB: ¿Piensas en el final de tu carrera?

Cuando eres jugador no ves claro que el final puede llegar… y llega. Es imprescindible asumir que tenemos una fecha de caducidad.

TB: Sin embargo haces muchas cosas, no parece que tu retiro vaya a ser inminente…

Clemente: Me encanta el presente, pienso que con el presente haces el futuro. Intento disfrutar de la vida. Lo más importante es la ilusión. Enfocar las cosas desde ese prisma. El día que pierda ilusión por algo de lo que esté haciendo significará un punto de inflexión. Diré, hasta aquí hemos llegado.

TB: ¿Dónde te jubilarías?

Clemente: Me ronda la idea de compaginar sitios. Asturias y Madrid. Madrid me apasiona, me engancha.  Pero también quiero conocer otros lugares, en ese sentido soy bastante inquieto.

TB: ¿Dónde y con quién te comerías un cachopo?

Clemente: En Asturias y con cualquier amigo. Tengo mucha familia allí y mantengo amistades de la infancia.

TB: Qué consejo darías a alguien que está luchando para conseguir su sueño.

Clemente: Pues otro buen amigo siempre me dice un refrán que me resulta increíblemente realista, ‘Paso de buey, ojo de halcón, diente de lobo y hacerse el bobo’, lo que significa humildad, trabajo e ilusión.